Entre todo lo que llovió la semana pasada, y todo lo que ha nevado ésta, hemos tenido el cielo bastante encapotado. Tenía yo la ilusión de haber visto el cometa Lovejoy, que ha estado de visita estas semanas, pero de momento no he tenido demasiada suerte. Lo mismo tengo que esperar a dentro de 8.000 años, que es lo que tardará en volver a pasar.
Otros cometas son menos esquivos, como el Halley, que pasa cada 76 años. Ya sabéis que el escritor Mark Twain nació en una visita de este cometa, y se fue en la siguiente (como él mismo había predicho que sucedería). No deja de ser una forma elegante de llegar y de despedirse ¿verdad?
Te cuento esto porque el otro día comentaba con un alma gemela que esto de defender la apuesta por el conocimiento escribiendo un post cada semana, y dando conferencias cada vez que nos llamaban, era una tarea a la que quizá debiésemos poner fecha de caducidad. No porque vayamos a dejar de creer en ello, sino porque puede llegar un momento en que acabemos aburriendo (o cabreando) a todo el mundo. A veces nos queda esa sensación, a mi alma gemela y a mí… Así que igual voy buscando en el cielo una estrella, un cometa o una nebulosa que me permita despedirme de forma elegante.
O un aniversario de alguna fecha señalada. Hubiera podido hacerlo este miércoles, que se cumplían 10 años del día que me incorporé a IK4 el día de su presentación en sociedad, allá por el año 2005, O el próximo 5 de julio, que se cumplirán 8 años desde que me incorporé a Innobasque, el día de su creación… O el día siguiente, 6 de julio, que se cumplirán 7 años desde mi primer post en Thought in Euskadi “Yes, we can!”.
O quizá el título de ese primer post sea una pista, y deba esperar al último día del cometa Obama, que dentro de unos meses se despedirá de la Casa Blanca, tras ocho años de mandato. Es de los pocos líderes que siempre ha defendido con claridad esto del I+D, primero en los discursos, y luego en los presupuestos.
Hace unas semanas lo decía alto y claro en su penúltimo “Discurso del Estado de la Unión“. Te dejo los fragmentos relevantes, aunque te invito a que lo leas entero, los discursos de Obama son casi siempre obras maestras de la oratoria.
“Las empresas del siglo XXI dependerán de la ciencia, la tecnología, la investigación y el desarrollo que se realice en Estados Unidos (…) Ahora, la verdad es que cuando se trata de temas como la infraestructura y la investigación básica, sé que tenemos el apoyo bipartidista en esta cámara. Me lo han comunicado miembros de ambos partidos.
Sin embargo, solemos toparnos demasiado a menudo con dificultades insalvables cuando intentamos decidir cómo pagar esas inversiones (…)
Este año tenemos una oportunidad de cambiar todo esto.”
y esta semana pasada lo ha cumplido, presentando un proyecto de presupuestos con un un incremento de la dotación de I+D de casi el 6%, y el anuncio de nuevas medidas fiscales para apoyar el I+D privado. Ya veremos lo que queda después de pasar por el Congreso y el Senado, donde los republicanos y los lobbies esperan los presupuestos con el cuchillo y el tenedor…
En fin, seguiremos vigilando el cielo, leyendo libros y viendo películas, a ver por dónde llega mi estrella. Precisamente hace unas semanas se estrenó “Comet” en USA, cualquier día llegará por aquí. Un película muy original sobre la historia de una pareja en un universo paralelo, al que entran mientras contemplan la lluvia de estrellas que trae la cola de un cometa…