Álvaro
Fauno de ojos brillantes, esperé paciente a que llegaras, te abracé, y la paz inundó tu pecho. Desde entonces, estudio tus detalles; horas, días, tratando de aprenderte. Miro tu cuerpo dormido de luna menguante, las venas rojizas que recubren los párpados, ríos sinuosos donde perderme. Pelo de plumón dorado, dos remolinos coronan tu nuca; […]