Los filtros invisibles de la busqueda de información

Mucho tiempo llevo dandole vueltas al tema de la «comodidad» de las tecnologías, especialmente a la busqueda continua de la comodidad en los procesos de búsqueda de información por parte de buscadores y otros agentes. Me resulta curioso ver en las clases que imparto de busqueda y acceso a información «científica de calidad» (siempre conveniente las comillas, hay que ver cada artículo y juzgarlo en si mismo), el poco conocimiento que en general tenemos de como optimizar una búsqueda en internet. Incluso, cuando nos referimos solamente al buscador que usamos miles de veces al mes, Google, el poco conocimiento es ciertamente alarmante. La mayoría de las ocasiones utilizamos unicamente Google para buscar, ya sea información trivial o respuestas a preguntas importantes, pero pocas veces nos planteamos el porque del orden en la obtención de respuestas o si este orden es igual para todo el mundo. Hace dos días llego a mis manos un interesante libro escrito por Eli Parisier, al que podeis ver y escuchar hablando del mismo en esta charla de TED, titulado The Filter Buble. 

Aunque solo he leido unas decenas de páginas aún, no me resisto a dejaros esta pequeña perla extrraida del mismo al hablar del proceso de personalización de las busquedas que realiza google gracias a más de 55 «señales» que «recoge» de cada usuario. «In polls, a huge majority of us assume search engines are unbiased. But that may be just because they’re increasingly biased to share our own views. More and more, your computer monitor is a kind of one-way mirror, reflecting your own interests while algorithmic observers watch what you click«.

Cada vez tengo más claro que el sistema educativo, en todos los niveles, debe preocuparse y mucho por capacitar a la sociedad en uso, crítica, busqueda y acceso a fuentes de información, especialmente digitales, que cada vez más se están volviendo referencia «unica» en la busqueda de información. Porque las busqueda de la comodidad, la eficacia y la eficiencia no es nala, siempre y cuando no se lleve por delante la capacidad crítica, la creatividad y la necesidad de escuchar y conocer lo que dicen y cuentas aquellos que no piensan como nosotros. Este libro promete, seguro que aparece más por este blog.