Hoy publicamos en la sección dedicada a nuestros antiguos alumnos la entrevista a una estudiante de Grand Valley State University. Anna-Lise Baldwin estuvo aquí en otoño de 2019 cursando el programa de Lengua y Cultura. Puedes ver aquí la entrevista original en inglés.
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¿Cuáles son tus mejores recuerdos del semestre en Bilbao?
«Si bien es difícil incluir todos los recuerdos favoritos de mi semestre en Bilbao, algunas de mis actividades favoritas fueron las siguientes:
- Ir de excursión con amigos por las montañas de los alrededores. En los días de buen tiempo, tratábamos de encontrar nuestro camino hasta la cima de alguna de las montañas que rodean Bilbao, gozando de las excelentes vistas y del tiempo que pasábamos juntos.
- Ir a la playa con mi familia de acogida. Los primeros fines de semana del semestre mi familia anfitriona me llevaba a una hermosa playa cercana, donde pasábamos todo el día al sol charlando en español.
- Excursiones de fin de semana a nuevos lugares cerca de Bilbao. El programa CIDE incluye varias excursiones a lugares cercanos a la ciudad de Bilbao, como, por ejemplo, a San Juan de Gaztelugatxe, ¡que es impresionante! También disfruté de visitar San Sebastián, Santander y Burgos con amigos, ya que todos estaban a un corto trayecto en autobús.
- Café y citas de estudio con amigos. Mientras estudiaba en el extranjero tenía deberes y tenía que estar preparada para las clases. El tiempo que pasé estudiando en las cafeterías locales es uno de mis recuerdos favoritos, un aspecto de la «vida real» en el extranjero.
- Caminar por la ciudad (¡mucho que ver!). Como terminaba las clases antes del almuerzo, me encantaba aprovechar las tardes con amigos caminando por la ciudad de Bilbao. La ciudad no es demasiado grande, pudimos descubrirla a lo largo del semestre y disfrutamos mucho de la actividad que muestra a cualquier hora.
- Jugar fútbol con estudiantes locales e internacionales. Encontrar grupos para jugar a fútbol terminó siendo una de mis actividades favoritas de estudiar en el extranjero porque así fue como conocí a muchos de mis buenos amigos. ¡Jugaba a fútbol unas dos tardes por semana, con sol o con lluvia!
- También me encantó ir a los partidos de fútbol del Athletic de Bilbao. ¡Siempre era muy divertido y es una forma de conectar con la cultura local de una manera muy auténtica!»
¿Qué clases tomaste? ¿Cuáles te gustaron más?
«Durante mi estancia en Bilbao, en la Universidad de Deusto, cursé Introducción a la Lingüística Hispánica, Panorama de la Literatura Española, Cultura, Política y Economía Españolas y Español a través de la Gastronomía. Aunque disfruté de todas mis clases, mis favoritas fueron Lingüística Hispánica y Cultura, Política y Economía Españolas porque aprendí más de lo que esperaba.»
«En el curso de Lingüística descubrí una nueva forma de ver el idioma y pude aprender más sobre el trasfondo de los sonidos y acentos, lo que me resultó muy interesante.
También disfruté de mi clase de Cultura, Política y Economía Españolas porque me enseñaron aspectos de la cultura, la política y la economía que no hubiera aprendido en los Estados Unidos.
También me gustó Español a través de la Gastronomía porque pude aprender mucho sobre la cocina vasca mientras repasaba mi gramática española. Lo que más me gustó de mi clase de gastronomía fue ir al Txoko a cocinar el menú y luego comer lo que habíamos cocinado en la clase!»
¿Qué otras actividades has hecho?
«Mientras estuve en Bilbao, participé en actividades dentro y fuera de la universidad. Dentro de la universidad, participé en competiciones internas de fútbol con otros estudiantes internacionales, jugué a fútbol y a fútbol sala todas las semanas con estudiantes locales, internacionales y otros estudiantes de intercambio de diferentes partes de España. ¡Jugar al fútbol fue una de las mejores maneras de conocer amigos y practicar mi español mientras hacía algo que me encanta!
También enseñé inglés semanalmente a dos alumnos de Bilbao. Esta fue una gran manera de pasar tiempo con niños y ganar un poco de dinero. Las familias que conocí dando clases de inglés fueron muy amables y acogedoras, lo que también contribuyó a mi experiencia positiva.
Parte de estar en España significaba que estaba más cerca de diferentes ciudades españolas y países a los que quería viajar. Pasé algunos fines de semana viajando con mis nuevos amigos a lugares como Valencia, Burgos, Barcelona, Madrid y San Sebastián dentro de España; y París, Londres, Lisboa y Oporto, y Dublín y Galway fuera de España. Aunque quería viajar y ver ciertos lugares, también quería pasar tiempo en Bilbao y fines de semana con mis amigos y mi familia de acogida, así que intenté limitarme a viajar cada dos fines de semana para asegurarme de que seguía pasando tiempo en Bilbao.
También me inscribí en el programa de intercambio lingüístico de la Universidad (tándem) y me reuní con una estudiante local para practicar español mientras ella tenía la oportunidad de practicar su inglés. Una de las partes que más me gustó de los encuentros con gente local fue encontrar nuevos lugares en Bilbao que no hubiera encontrado o conocido por mi cuenta.»
¿Ha impactado en tu vida estudiar fuera? ¿Lo recomiendas?
«Estudiar en el extranjero fue una de las mejores decisiones de mi vida. Durante mi estancia en Bilbao, aprendí mucho sobre el mundo, sobre los demás y sobre mí misma que no habría aprendido de no haber ido al extranjero. Aunque aprendí mucho en clase, tengo la sensación de haber aprendido un montón cada día fuera del aula. Cuando miro hacia atrás me doy cuenta de lo diferente que veo ahora el mundo, la vida y a mí misma. Estudiar en Bilbao fue perfecto para mí porque la ciudad no era demasiado grande pero aún así tenía un aire de gran ciudad. También sentí que la Universidad de Deusto era muy acogedora y única en comparación con las universidades de Estados Unidos. Estudiar en el extranjero no solo me ayudó a mejorar mi capacidad de hablar español, sino que también me ayudó a mejorar como persona. Estudiar en el extranjero me abrió los ojos a una nueva cultura, estilo de vida y gente que me enseñó que «el mundo es un pañuelo» porque aunque es físicamente grande, hay muchas similitudes entre gente de todos los lugares. Definitivamente recomendaría estudiar en el extranjero porque es una oportunidad única que te permite expandir tus horizontes mientras te obliga a abrirte a muchos aspectos nuevos como la cultura, las perspectivas y la gente. Recomendaría de todo corazón estudiar en el extranjero porque cambiará tu vida de la mejor manera posible.»