Autor: Rodoljub Jovanović es doctorando en el Centro de Ética Aplicada
Recientemente, representantes políticos serbios han realizado declaraciones pidiendo un control estatal completo de la elaboración de libros de texto de historia en Serbia, con especial enfoque en las guerras de la década de los 90.
Estas afirmaciones malinterpretan los procesos actuales de elaboración de los manuales de historia, pero lo que es más importante, demuestran el modo en que el Gobierno serbio entiende la finalidad de la educación de historia. Es particularmente preocupante, dado que Serbia es un país con un pasado reciente de conflictos violentos.
Teniendo en cuenta que el contenido de los manuales de historia nos dice más sobre el tiempo en que vivimos y las visiones de futuro que acerca del pasado del que tratan, ¿cómo podemos entender estas declaraciones?
Lee el post completo en inglés en el blog Memory Cultures in Dialogue: