Artículo publicado en El Correo – edición impresa (29/01/2024)
Hay un 31% de ciudadanos en Euskadi que no votarían bajo ninguna circunstancia a EH Bildu. Es el doble de rechazo total que tienen sus principales competidores en las próximas elecciones vascas, el PNV y el PSE, que se mueven alrededor del 15%. Entre los votantes del PSE el rechazo frontal a la izquierda abertzale alcanza a la mitad de sus votantes. Tan solo un 11% de los votantes socialistas dice que no votaría nunca al PNV. En cambio, los votantes de EH Bildu comparten el mismo índice de rechazo hacia el PSE que hacia el PNV. Uno de cada cuatro de sus votantes no metería nunca en la urna la papeleta de ninguno de los dos partidos que ha gobernado Euskadi en los últimos cuatro años.
Estos datos del Deustobarómetro ayudan a interpretar la puesta en escena de los líderes de dos de los tres partidos más importantes que competirán en las próximas elecciones vascas y de los que dependerá la formación del próximo Gobierno. El candidato socialista, Eneko Andueza, fue el primero que escenificó el estribillo de su discurso y durante las últimas semanas se ha encargado de transmitir de forma insistente y clara que su partido no formará un gobierno de coalición con EH Bildu y que tampoco sus diputados servirán para hacer lehendakari al candidato de la izquierda abertzale. Ha elegido el terreno de las alianzas para transmitir el espacio al que aspira a representar. Es el mismo terreno que ha elegido Pello Otxandiano para marcar la agenda vasca con su posicionamiento político y la visualización de sus alianzas favoritas y deseables, más allá de la irrele
vancia de la lista más votada en una democracia parlamentaria. Quiere que la ciudadanía le vea más cerca del PNV que del PSE, más cerca de un reconocimiento al PNV por lo hecho hasta ahora que de una enmienda a la totalidad del partido al que pretende ganar las elecciones. Una estrategia que sintoniza bien con el clima social y el estado de ánimo de la ciudadanía vasca.
Por otro lado, el partido que la ciudadanía cree que está más capacitado para solucionar los problemas que percibe en el funcionamiento de Osakidetza es el PNV. Un 19 % cree que es el mejor gestor posible de la sanidad pública, por encima de un 17% que piensa que es EH Bildu. Si ampliamos la mirada a quién es visto como el mejor gestor en general, el PNV sería todavía considerado como el que muestra mejores aptitudes en este terreno para la mayoría de la ciudadanía vasca; un 53% lo cree así, frente a un 16% que piensa que es Bildu el partido más preparado para la gestión y el buen gobierno. Estos datos también nos ayudan a entender por qué el nuevo candidato a lehendakari del PNV ha elegido un tema, una política pública y una de las mayores preocupaciones de la sociedad vasca como símbolo de su primer discurso como candidato. Al hacerse cargo de la mala situación de Osakidetza, Imanol Pradales está no solo acercándose a las preocupaciones reales de la ciudadanía vasca, sino que sabe que lo está haciendo en un tema en el que sus competidores no le sacan ninguna ventaja.
Leave a Reply