Artículo publicado en El Correo (11/10/2024)
El ecosistema empresarial de Euskadi se enfrenta a un momento decisivo: o fomenta el intraemprendimiento y la cultura emprendedora dentro de sus propias empresas o corre el riesgo de quedarse atrás en un mundo cada vez más competitivo y globalizado. La capacidad de las personas para poner en marcha y liderar proyectos dentro de las empresas se ha convertido en uno de los pilares fundamentales del crecimiento económico y de la innovación.
El intraemprendimiento, entendido como la puesta en marcha y el desarrollo de iniciativas emprendedoras aprovechando los recursos y fortalezas de una organización, es una oportunidad estratégica para que el territorio vasco se convierta en un referente en innovación. Estas iniciativas pueden traducirse en nuevas unidades de negocio, productos o servicios, y surgen desde los y las empleadas de las organizaciones. Algunas generarán empresas independientes, mientras que otras se integrarán para incrementar el valor de la compañía. Euskadi no es la excepción, y aprovechar este potencial puede ser una gran palanca para competir en los mercados globales con una visión creativa y autosuficiente.
HABILIDADES Y COMPETENCIAS PARA INTRAEMPRENDER
En general, las empresas de Euskadi valoran cada vez más profesionales que, además de su formación técnica, cuenten con habilidades transversales que les permitan desarrollar y liderar proyectos dentro de las organizaciones. Más allá de las competencias digitales o específicas de cada sector, los y las empleadas que destacan son aquellas personas capaces de liderar iniciativas innovadoras dentro de las compañías. Habilidades como el liderazgo, el pensamiento creativo, la facilidad de trabajar en equipo y la resolución de problemas, conocidas como soft skills, son esenciales para impulsar proyectos de intraemprendimiento.
En mi rol como directora de Innovación y Emprendimiento de la Universidad de Deusto y a lo largo de toda mi trayectoria profesional, he podido comprobar cómo estas soft skills, que considero imprescindibles, están ganando protagonismo en la creación de nuevas oportunidades de negocio y en la capacidad de las empresas para adaptarse a entornos cada vez más cambiantes y dinámicos. Estas habilidades blandas se han convertido en un elemento fundamental para fomentar la innovación y generar valor en un entorno empresarial en constante evolución.
EL COMPROMISO DE LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS CON LA INNOVACIÓN Y EL EMPRENDIMIENTO
Las instituciones educativas tenemos la responsabilidad de formar a personas comprometidas con su presente y futuro, liderando la transformación, capaces de ofrecer soluciones a los retos globales con una mentalidad innovadora y emprendedora. En este sentido, la Universidad de Deusto, a través de la Unidad de Innovación y Emprendimiento, Deusto Emprende, estamos también comprometidos con impulsar esta transformación en sus centros y con sus estudiantes. El Modelo Deusto de Innovación y Emprendimiento H4C3R tiene como propósito acompañar a las personas a lo largo de la vida y fomentar una cultura emprendedora e innovadora, tanto dentro como fuera de la Universidad. Pretendemos que el alumnado no solo adquiera habilidades técnicas a través de los contenidos de sus grados y dobles grados, sino que también desarrolle las soft skills necesarias para ser agentes de transformación económica y social. Así, contribuimos a formar profesionales que cuentan con las herramientas necesarias para responder a las demandas del mercado laboral y fortalecer el tejido empresarial de Euskadi.
Solo así podremos preparar a las personas para liderar el cambio y generar valor en un entorno cada vez más dinámico y exigente.
Leave a Reply