Artículo publicado en El Correo (21/02/2023)
Los fines de semana se van llenando de actos de campaña de cara a unas elecciones municipales y forales que todavía no han despertado el interés de la ciudadanía. Las encuestas vascas anuncian en general un mar de fondo favorable a la reválida del poder institucional del PNV, consolidándose como la primera fuerza política del país. Y el enfoque desde el principal partido de la oposición, EH Bildu, vuelve a ser el mismo que el de las últimas elecciones vascas. Se presenta como el mejor socio posible de una coalición de gobierno con capacidad de pactar tanto con el principal partido nacionalista vasco, como con los partidos de la izquierda estatal. Apostando por cambiar la estabilidad de los pactos del PNV y el PSE por otra estabilidad basada en la geometría variable de los pactos diversos.En este artículo vengo con datos sobre esto recogidos en el último Deustobarómetro de invierno.
¿Cómo ven los votantes de los partidos implicados esa geometría variable de los pactos diversos? ¿Cuáles son sus coaliciones favoritas a nivel local? Empecemos por los votantes del partido que propone esa geometría variable. Hay más apoyo dentro de sus votantes a una coalición de izquierdas, 49%, que a pactar con el PNV, 36%. Los votantes del ONV tienen el corazón dividido casi en dos partes iguales. El 42% prefiere que su partido busque a EH Bildu para formar coaliciones nacionalistas y el 43% que continúen sus pactos de gobierno con el Partido Socialista de Euskadi. El PSE es el partido al que más interpela la estrategia de los pactos de la izquierda abertzale. Sus votantes por ahora preferirían continuar con sus acuerdos con el PNV, 46%, que abrirse a gobiernos de coalición con EH Bildu y otras fuerzas de izquierdas. Lo que está claro es que para ese posible tripartito pueden contar con el apoyo de la inmensa mayoría de los votantes de Elkarrekin Podemos, 75%. Los abstencionistas, recordemos que muy numerosos en este país, no tienen preferencias muy marcadas en este terreno. Con pequeñas diferencias, prefieren en primer lugar una coalición de izquierdas. En segundo lugar, la repetición de los pactos PNV-PSE y como última preferencia los acuerdos entre las dos fuerzas nacionalistas vascas.
La mayoría del electorado defiende el actual método de selección de los gobiernos locales y está en contra de la propuesta de permitir gobernar siempre a la lista más votada. Tan solo la mayoría de los votantes del Partido Popular y Vox en Euskadi están a favor de esta idea. La cultura de los pactos está arraigada en Euskadi y se asocian a una democracia de calidad. Por último, siguiendo con la voz y las preferencias ciudadanas, no existe un clamor popular por conocer antes de las elecciones cuáles son las intenciones de pacto de cada partido en caso de no poder gobernar en solitario. Solo comparte esa curiosidad el 38% de la ciudadanía.
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