El pasado viernes, 1 de diciembre, tuvo lugar el Acto de Reconocimiento del Grupo Motor del Laboratorio Urbano de Barakaldo, organizado por Inguralde. El Grupo Motor ha estado trabajando durante 10 meses con un principal objetivo: reflexionar acerca de la pregunta ¿Qué ciudad queremos? y ser los primeros en pasar a la acción.
El Laboratorio Urbano, concebido como una respuesta innovadora para dar forma al futuro de Barakaldo, ha concluido su fase inicial con un encuentro lleno de logros y colaboración inspiradora. La Universidad de Deusto, a través de Deusto Emprende, ha tenido la gran suerte de acompañar a las empresas que han formado parte de este proyecto a lo largo del proceso. Los participantes han puesto mucho de su parte a la hora de trabajar los diferentes estadios y de trabajar de forma metódica y sistemática sus ideas gracias a la metodología propuesta por José Luis Larrea.
Barakaldo, una ciudad innovadora medioambiental y socialmente
La comunidad de Barakaldo aspira a ser una ciudad innovadora tanto desde el punto de vista medioambiental como social. La participación activa de las personas se vislumbra como el elemento clave para transformar su entorno y convertirlo en un espacio dinámico y sostenible.
Sistematizando la innovación para el futuro
Reconociendo la necesidad de estructurar la innovación, el modelo de Laboratorio Urbano se erige como la estrategia para el futuro. Ha sido un gran ejemplo de colaboración multidisciplinar, intersectorial y multinstitucional y de colaboración público-privada, por la consecución de un mismo objetivo. Numerosos agentes y empresas se han involucrado y han salido de su día a día para convertir este proyecto en una realidad.
Un Grupo Motor diverso y comprometido
Compuesto por empresas de sectores muy diversos, el Grupo Motor ha sido el motor propulsor de este viaje. Más de 10 meses de arduo trabajo han revelado un compromiso personal y profesional excepcional, haciendo esto posible una colaboración efectiva entre empresas de ámbitos diferentes. . La colaboración efectiva entre estas empresas ha contribuido significativamente al componente social, y la recuperación del juego de la rana ha simbolizado la revitalización de la identidad local.
Agradecimientos y reconocimientos emocionantes
La alcaldesa Amaia del Campo expresó su profundo agradecimiento a todos los participantes, destacándolos como los constructores de Barakaldo durante los últimos 10 meses. Con emoción, reconoció a los participantes sus esfuerzos por convertir el Laboratorio Urbano en una realidad tangible, aspirando a que se convierta en un símbolo icónico de la ciudad, que fomente la innovación desde la participación ciudadana.
Mirando hacia el futuro
Una mención especial se reservó para Carlos Rico, de Goitsak, el diseñador visionario detrás del juego de la rana. Este proyecto, con un gran componente social, se ha realizado en colaboración con la Cuadri del Hospi, entidad benéfica de familias con pacientes oncológicos infantiles del Hospital de Cruces. El proyecto consiste en la recuperación del tradicional juego de la rana, contando para su ejecución con la participación activa de ocho de las empresas del Grupo Motor. La colaboración ejemplar con otras empresas demostró que las ideas, a través de una innovación sistematizada y colaborativa, pueden tener un impacto real y positivo en la comunidad.
Concluimos este capítulo con un gran sentimiento de satisfacción. Nos gustaría agradecer al Ayuntamiento de Barakaldo su implicación en este tipo de iniciativas, a Eukene Bengoa y Teresa Gaminde de Inguralde su tan importante labor en este proyecto y a todos los participantes del Grupo Motor sus aportaciones y continuos esfuerzos. Ha sido un placer acompañaros en este proceso.
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