Se va acabando la etapa universitaria, va llegando la hora. Se acerca uno de los momentos más deseados y que a la vez más vértigo da en la carrera. Llevamos mucho tiempo pensando en cómo será. Se trata de buscar y escoger lo que va a ser nuestro primer contacto con el mundo laboral.
Ganas, motivación, dudas, nervios, presión, expectativas… Tenemos una mezcla de sensaciones que muchas veces nos cuesta afrontar, ya que sentimos que comenzamos a definir nuestro futuro, a escoger nuestro camino. Como es lógico, todos queremos unas buenas prácticas.
¿Qué son unas buenas prácticas?
De una forma breve diríamos que aquellas en las que se aprende mucho, que son en una buena empresa (y si tiene prestigio mejor que mejor), que tengamos opción a que después nos contraten; y ya si nos gusta y además recibimos una pequeña ayuda económica, quizás estemos ante unas prácticas perfectas.
Teniendo estas características como punto de partida comenzaremos a enviar nuestro CV a aquellas empresas que más nos atraigan.
En el caso de los marketinianos, creo que en la mayoría de los caso, en la cabeza de nuestra lista de empresas se encontrarán aquellas de Gran Consumo, empresas relacionadas con la moda, el lujo etc. Es lógico, además de ser empresas muy atractivas, tienen productos que nos encantan y, ¿a quién no le gustaría formar parte de esa marca?
Sin embargo, hay mucho más que estas empresas; existen otros sectores que por el hecho de que hayamos tenido menos contacto con ellos, no significa que no nos vayan a gustar, y menos aún que no se puedan realizar unas buenas prácticas.
Me pongo como ejemplo.
Al igual que muchos, yo también quería realizar mis primeras prácticas en un departamento de Marketing de una empresa de Gran Consumo o productos de lujo. Lo tenía muy claro y me resultaba complicado ver más allá. Sin embargo, entre las empresas a las que llegó mi CV, una de ellas era una de las aseguradoras más potentes a nivel nacional. Recibí la llamada. En un primer momento no sabía cómo reaccionar, ya que no se parecía a lo que yo buscaba, y además mi conocimiento y curiosidad por el sector de los seguros era mínima. No obstante, decidí continuar con el proceso y realizar una entrevista, que además sería por Skype, ya que la empresa se encuentra en Madrid. En esa entrevista me encantó lo que me proponían, pero al mismo tiempo también estaba en otros procesos, algunos para empresas que a primera vista eran mucho más atractivas, aunque la oferta no fuese tan buena. Necesitaba pensarlo muy bien, ya que no era la única empresa de la que tenía el sí.
Después de darle muchísimas vueltas, decidí la opción de mudarme a Madrid para realizar mis prácticas en el departamento de Marketing de una empresa de seguros.
¿Mi sorpresa al llegar? Estoy en el equipo de Creatividad y Marketing Directo, detrás de todos los materiales publicitarios de la empresa, gestionándolos y además en su proceso de producción (rodajes de anuncios de televisión, grabaciones de cuñas de radio, preparar materiales para eventos…).
Aquí no me tratan como una becaria, sino como una más del equipo y además, me han dado la oportunidad de continuar más tiempo en la empresa una vez finalizadas las prácticas. Sin lugar a duda, han superado mis expectativas. Los meses anteriores a buscar prácticas no se me hubiese ocurrido buscar unas prácticas así y menos aún en una aseguradora; y gracias a decidirme por una oferta que me encantaba y dejar a un lado el tópico de “el sector de los seguros es aburrido”, he descubierto dentro del Marketing varios caminos que sin duda serán opciones a valorar para un futuro cercano.
¿A qué quiero llegar con esto?
Me gustaría daros como consejo a los que comencéis a buscar prácticas o primer empleo:
que no os dejéis llevar por los estereotipos y rechazar ofertas solo porque una empresa y su sector no os parezcan lo suficiente atractivos en un primer momento; que unas prácticas sean mejores o peores no dependerá de esto.
No hay que frustrarse por no conseguir las prácticas con las que llevábamos soñando los últimos meses. Siempre se pueden probar otras opciones, y una vez conocidas, decidir si queremos continuar por ese camino o retomar la búsqueda de aquellas prácticas o primer empleo que tanto queríamos.
Recuerda, nunca es tarde para intentarlo, lo importante es ser feliz con lo que hacemos.
Sarai Ramos
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- Los estereotipos del mundo laboral y del marketing (por Sarai Ramos) - 20 septiembre, 2017
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