Os presentamos la experiencia de nuestra aluma Pilar Pagola, que el pasado curso escolar finalizó su formación en el Titulado Universitario en Cultura y Solidaridad de Deusto Estudios de Ocio de Universidad de Deusto.
Sin duda, ejemplo de una persona activa, con inquietud y deseo de aprender, que ha disfrutado de esta experiencia y que le ha motivado a seguir con nosotros, este curso en concreto, en el Monográfico Interbellum. Así nos lo cuenta:
Una vez jubilada, acudí a la Universidad, a la presentación de la nueva programación, dispuesta a comenzar el nuevo curso. Tenía alguna duda entre varios programas, pero Itziar Zubieta, secretaria del Instituto, me animó a elegir este programa, lo cual se lo agradeceré siempre.
A mis amigos y familia no les extrañó mi decisión, ya que a lo largo de mi profesión de enfermera hospitalaria, la formación continuada ha estado presente, asistiendo a todo tipo de cursos presenciales. Así que no hubo ninguna duda, ante mi ilusión por comenzar esta nueva etapa de aprender disfrutando.
Entre las asignaturas que más me han motivado se encuentran las relacionadas con derechos fundamentales del ser humano, así como todo lo relacionado con el arte.
Esta nueva apertura a conceptos como solidaridad, vivir con optimismo, empatía, tolerancia, nos proporcionan herramientas para manejar situaciones de la vida cotidiana.
Comencé muy ilusionada y la asistencia a clase, la buena armonía del grupo, y los profesores que han impartido las asignaturas tan interesantes, han hecho que las expectativas hayan sido más que superadas.
La ampliación del conocimiento es diaria, sobre temas actuales y variados que desconocía.
Al inicio de esta andadura, la preocupación estaba relacionada por la realización de los trabajos que hay que realizar, y del manejo de Word, que desconocía. Pero el compañerismo de los compañeros, alguna ayuda por parte familiar y más adelante el acceso a cursos de aprendizaje, impartidos por la Universidad, consiguieron que fuéramos capaces de realizarlos dignamente, y además disfrutar del tema, la mayoría de las veces elegido.
Las temáticas que se tocan son tan interesantes, que implican una total atención, lo que supone desconectar por unas horas, es decir descanso mental, al disfrutar escuchando a los profesores que transmiten su entusiasmo por asignaturas que han preparado con mucho esfuerzo. A veces surge el debate que resulta interesante, aprendiendo a escuchar a unos y otros compañeros.
He abordado temáticas tan interesantes como Las grandes religiones impartida por el Profesor Lucio Uriarte; La música con Mercedes Albaina; La Unión Europea y los Juicios paralelos, con Ana Pérez; El Islam, fundamentalismo e islamofobia, impartido por el Profesor Hithem Abduheleem, tema de tanta actualidad, y del cual hablamos y opinamos desde el desconocimiento total.
Cultura y cristianismo, impartida por Mikel de Viana, resulta tremendamente interesante, ya que la aportación de documentación que nos proporciona, más los debates sobre dudas y opiniones que se presentan, a primera hora, supone una apertura a temas desconocidos y que el profesor con su aportación, consigue que los conceptos resulten claros.
Hemos disfrutado de la clase de Ética y formación humana, con Errapel Mentxakatorre, donde disfrutamos también de una asignatura no muy conocida por mi parte, en la que son primordiales la importancia de las ideas y el conocimiento.
No quisiera dejar a nadie sin nombrar, ya que las asignaturas que se refieren al arte, literatura, pintura, cine, tienen una enorme importancia, así como la salud integral, que nos aporta un conocimiento más amplio de nuestro cuerpo y a manejar hábitos saludables.
Hemos acudido a museos acompañados por profesores, admiramos los cuadros teniendo en cuenta el color, perspectiva, composición etc. La literatura la disfrutamos teniendo en cuenta el narrador, y el punto de vista. Ejemplos que nos ayudan a disfrutar con los pequeños detalles de la vida diaria.
El ambiente es de compañerismo y resulta muy familiar. Así mismo la relación con los profesores. El hecho de que nos digan, que están para ayudarnos y no para presionarnos, supone un disfrutar de las clases sin agobio.
A menudo participamos en las actividades que se organizan durante el curso que sirven para compartir y conocernos durante las mismas.
Tras esta experiencia formativa he constatado que los logros son evidentes: la música se disfruta de una mayor más plena, así como la lectura, el disfrute de un obra pictórica, o de una película, es mucho más satisfactoria, ya que tienes herramientas que te ayudan a una mejor comprensión, y por tanto, mayor satisfacción.
Lo mismo ocurre con las noticias, ya que entre los conceptos tratados en clase, más las opiniones de los compañeros se va teniendo interés por temas que no te motivaban.
La presentación de un tema oral en el primer curso, fue uno de los retos a los que nos tuvimos que enfrentar y parecía tan imposible… Creo que lo disfruté, eligiendo el duelo.
Claramente, el hecho de acceder por la pasarela, ya es un privilegio. El ambiente resulta además muy familiar. Es un disfrute. Sin duda una experiencia gratificadora que recomiendo a todo el mundo.
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