Lecturas 11 de abril. Domingo II semana de Pascua
Esto de la fe va de vida. No se trata sólo de creer en unos enunciados, sino de la vida que nace de un marco de relaciones con Dios, con los que compartimos la fe, con la humanidad y con el mundo. Creer va de vivir en más plenitud.
El encuentro con el Resucitado abre las puertas de los autoconfinados por miedo, les da un revolcón y recolocan la vida de una manera nueva. La confesión de Tomás implica que su relación con Jesús es nueva y que por tanto su vida será renovada.
Hoy como cristianos puede parecer que vivimos cierto autoconfinamiento viendo cómo van a menos algunas cosas. Como a Tomás nos cuesta creer, y no dejamos que el Resucitado entre y renueve la vida de nuestras comunidades porque tenemos miedo a perder. Pero se nos olvida que no tenemos nada que perder y mucho por ganar. Feliz domingo.