Lecturas 10 de febrero de 2022. Jueves V semana Tiempo Ordinario
La palabra demonio viene de Daimōn (δαίμων) que es una palabra del griego antiguo que significa «espíritu» o «poder divino», similar al numen o al genio de la mitología romana. Luego el sentido negativo de demonio se ha introducido más tarde en traducciones de la Biblia y finalmente en la Edad Media se quedó como lo entendemos.
La niña tenía un demonio que atormentaba a la propia niña y a su entorno, pero también tenía una madre que supo interceder por ella ante Jesús. El Evangelio destaca el poder de Jesús, incluso con extranjeros que tienen fe.
Echar demonios es uno de los signos del Reino. Nosotros podemos convertir el daimon (demonio) en eudaimon (felicidad). Se trata de que con la fuerza del Evangelio en nuestras vidas estos demonios malos y sus malos espíritus se conviertan en algo nuevo capaz de producir felicidad a nosotros mismos y a nuestro entorno. Feliz jueves.
Un signo del Reino, echar los demonios. A día de hoy sugieres que con la fuerza del evangelio, podamos convertir esa fuerza del demonio en algo nuevo capaz de… un reto