31 de mayo, Miércoles VIII semana del tiempo ordinario. Visitación de la bienaventurada Virgen María
Hay veces en que nos sentimos poca cosa y nos miramos con ojos que no terminan de ver bien. Se nos olvida que el Padre ha hecho obras grandes, enormes en mí, en ti y en todos. Se nos olvida el gran regalo que somos, a pesar también de nuestras fragilidades.
El Magnificat es una oración llena de experiencia de Dios. Un Dios que nos valora, un Dios que nos cuida, un Dios que nos hace justicia y un Dios que nos ha acompañado a lo largo de nuestra historia personal y compartida.
María nos puede inspirar el día de hoy para dar gracias, para sentirnos poderosos en el amor que nos permite hacer cosas grandes por los demás. Hoy María nos inspira a dar gracias por la gente que nos ama. Feliz miércoles.