1 de mayo. Miércoles V de Pascua
Nuestra vida no podría seguir adelante sino estuviéramos unidos a un (eco)sistema mayor. A pesar de que nos empeñemos en que todo dependa de nosotros, la realidad es que nosotros dependemos del todo. Podemos pensar hoy en el cambio climático, sociedad, familia, economía, cultura,… todo está unido y conectado.
La imagen de la vid y los sarmientos es poderosa. La vid es la fuente de vida para los sarmientos, proporcionándoles la savia necesaria para crecer y dar fruto. De la misma manera, Jesús es la fuente de vida para sus discípulos. Sin él, no podemos dar fruto bueno ni alcanzar la vida plena.
Hoy día del trabajdor podríamos caer en la cuenta de aqué y a quién estamos unidos. De dónde viene nuestro sustento compartido, con quién vivimos, a quienes estamos más unidos,… Se trata de descubrirnos de que no soy sólo, sino que participo de una comunidad de vida mucho más grande. Feliz miércoles.