6 de agosto. Martes de la XVIII semana del tiempo ordinario Transfiguración del Señor
El ser humano siempre ha querido atrapar la experiencia de los momentos sublimes. Hoy el modo más habitual es el selfie, en el que en nuestros viajes, reuniones, conciertos queremos atrapar el momento, a la vez que sin querer nos despistamos de lo que estamos viviendo.
En el texto de Marcos, Pedro, ante lo sublime, propone algo práctico: construir tiendas como modo de dar continuidad a aquello que están viviendo.. A menudo, nosotros también intentamos «capturar» o «contener» nuestras experiencias espirituales en lugar de simplemente maravillarnos y aprender de ellas.
Las vacaciones suelen ser ocasión de momentos especiales en los que en ocasiones queremos que se detenga el tiempo. Puede ser una ocasión para librarnos de nuestra ansia del dominio del momento y así, simplemente y sencillamente disfrutar del momento. Feliz martes.