20 de noviembre. miércoles de la XXXIII semana del tiempo ordinario
Vivimos en una sociedad que nos invita constantemente a buscar seguridad: el trabajo estable, el ahorro garantizado, o las rutinas previsibles. Sin embargo, esta búsqueda a menudo nos paraliza, haciéndonos esconder los talentos y oportunidades que se nos han confiado.
El Evangelio de hoy nos reta a ir más allá. Jesús nos recuerda que hemos recibido dones para que los hagamos fructificar, no para esconderlos. Nuestra vida es un regalo que cobra sentido cuando nos arriesgamos a invertir en el amor y en el servicio, aun sabiendo que los frutos pueden tardar en llegar.
Hoy se nos invita a salir de la comodidad de lo seguro y a dar un paso más allá. Se trata de reconcoer y poner en juego nuestros talentos que nos ayudan a transformar este mundo. Feliz miércoles.