9 de abril, Miércoles de la V semana de Cuaresma
En tiempos de polarización y verdades a medias, vivimos entre relatos que prometen libertad pero nos atan aún más a intereses ajenos. Se habla mucho de autenticidad, pero cuesta permanecer fieles a una palabra que cuestione.
Jesús nos recuerda que la verdadera libertad nace de habitar su palabra y dejar que ella eche raíces en nosotros. No se trata de argumentos ni de herencias, sino de una relación que transforma. El Hijo no impone, nos invita a conocer la verdad que libera.
Necesitamos de testigos de la libertad auténtica frente a propuestas pseudoverdaderas. Es un ejercicio de valor y de lucidez que a veces no tenemos. Podríamos empezar por discernir lo superficial de lo profundo para discernir los caminos de libertad. Feliz miércoles.
