16 de julio, martes de la XV semana del tiempo ordinario. Virgen del Carmen
En medio del verano, cuando muchos buscan descanso, hoy es la fiesta de la Virgen del Carmen, patrona del mar y de quienes se adentran en lo profundo. En un mundo que valora lo técnico, lo eficaz y lo brillante, la tradición carmelita nos recuerda el valor de lo oculto, de lo contemplativo, de lo pequeño. Como los pescadores que confían su rumbo a las estrellas, también hoy buscamos una luz que nos oriente en lo que no se ve.
Jesús agradece porque lo esencial no se revela a los poderosos ni a los que creen saberlo todo, sino a quienes se abren con humildad y confianza. Solo desde abajo se ve bien lo alto, y solo con el corazón sencillo se accede a lo más hondo.
Hoy podríamos descalzarnos por dentro y volver a mirar la vida con ojos nuevos. Que sepamos reconocer lo valioso más allá de las apariencias. Y que, como quien se embarca con el nombre del Carmen en la proa, nos dejemos llevar por aquello que da sentido y profundidad. Feliz miércoles.
