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¿Cómo Buscar Empleo sin Enviar Curriculum?

Business is business, pero ¿qué estás dispuesto a hacer para conseguir una entrevista de trabajo?

Será un tema a considerar si llegas a utilizar la técnica del Elevator Pitch para conseguir un trabajo ya que tendrás que estar preparado para presentarte en cualquier momento.  La ambición te llevará a dar un paso más para enfocar de manera diferente tu búsqueda, echando mano de habilidades adquiridas en el campo personal. Estas habilidades componen el arsenal que utilizamos para conseguir lo que queremos o para camuflar lo que no queramos que se vea. Para encontrar empleo mediante esta técnica, se requerirá toda tu picaresca de cara a una buena presentación.

La técnica del Elevator Pitch es fruto de la invención y servirá como herramienta de comunicación al trovador contemporáneo que experimente con ella. Utilizamos esta técnica en el ámbito laboral para darnos a conocer sin cumplir con las formalidades que supone la búsqueda de empleo; envío de currículum, concertar una cita para hacer la entrevista, realizar dinámicas de grupo, etc.

En este caso, factores como la labia, el lenguaje corporal y el encanto a la hora de comunicarte y enviar información será tu pase para conseguir una propuesta de trabajo. Tendrás que dejar atrás la timidez y la vergüenza, como si se tratase de un juego de amor ya que para firmar un contrato y un “acepto las condiciones”, deberás de superar la prueba definitiva de esta “cita a ciegas”.

Plantearte realizar esta técnica supone un tiempo de dedicación previo importante ya que factores como el azar y la improvisación no serán los mejores aliados para captar la atención que queremos.  Las pautas principales para elaborar un buen Elevator Pitch son las siguientes:

  1. Definir el Elevator Pitch para cada persona a la que quieres dar a conocer tu proyecto, diferenciando la duración, los elementos y el alcance de tu presentación esporádica.  ¿Qué mensaje quieres que transcienda a la persona a la que te diriges? Personalízalo.
  2. La forma importa más que el contenido del mensaje: La mente es selectiva y la memoria más aún. Sólo retenemos un 8% de todo lo transmitido de forma verbal; el otro 92% del mensaje se pierde por el camino. Tu propuesta puede ser rechazada si no eres capaz de transmitir la información utilizando distintas entonaciones, volúmenes, silencios, enfatizando las ideas a las que quieres dar más importancia etc. Deberás ser capaz de transmitir esa emoción a través del lenguaje no verbal (gestos, posturas, expresiones…), dejando de lado el papagayo que podría hablar por ti y recitar tu proyecto.
  3. Deberás incluir las características y los beneficios que puedes ofrecer de una manera directa y concreta. Responde a las preguntas más significativas, posicionándote y dejando claro quién eres y qué eres capaz de hacer.
  4. Crea una buena impresión para captar la atención y lograr retener la información que quieres transmitir. El discurso tiene que ser fácil de entender y comunicado con pasión y entusiasmo. Si tú mismo no crees en tu proyecto… ¿Quién lo hará por ti?
  5. Demuestra el frenesí que contiene tu proyecto. Lo has creado tú, demuestra que el tiempo invertido merece la pena.
  6. Lo bueno si breve, dos veces bueno. Tu objetivo principal es levantar la curiosidad de la persona que pueda contratarte, para provocar un posterior encuentro “más formal”. Impáctale lo suficiente como para que tenga ganas de saber más de ti y de lo que le propones, pero no entres en detalle en un primer momento. Guárdate varios ases en la manga.
  7. No seas impaciente e intenta encontrar el momento idóneo porque puedes perder la oportunidad. No serás el único proyecto que habrá visto la persona de tu interés en los últimos días, por lo tanto, no empieces con desventaja.
  8. Si ves que no encuentras el momento perfecto, genéralo de tal forma que la oportunidad se te presente (Va a entrar al ascensor, ¡me meto yo también!).
  9.  Que nadie pueda cuestionar tu trabajo. Hay que estar seguros hasta de los puntos y comas para presentarte a un recruiter o a un inversor. Le podrá gustar o no gustar tu propuesta pero es muy importante que no cuestione ninguno de tus puntos fuertes de tu propuesta porque, por ejemplo, no sea objetivamente viable o porque le falte un matiz importante que se te haya pasado por alto.

Ésta técnica puede darte la oportunidad laboral de tu vida o hacerte pasar un ridículo espantoso por no haber sabido encajar la situación o plantear bien tu discurso. Es un riesgo muy pequeño para todo lo que puedes ganar. Debes estar preparado para cualquier impresión y sobreponerte a todas ellas por tu trabajo, que en este contexto es lo único que vale. Demostrar que puedes contribuir al éxito de la organización o proyecto en cuestión.

El miedo a hacer el ridículo o a no creerte capaz de dar a conocer abiertamente tu trabajo hará que el recruiter o inversor pierda el interés, y a largo plazo, tú también, porque no te sentirás capaz de presentarte eficazmente ante nadie.

Te aconsejamos que alimentes la sonrisa y agudices el ingenio para dar lo máximo de ti mismo, sintiendo que eres la mejor persona para realizar ese trabajo, por el que estás dispuesto a trabajar duro, e incluso, a pasar vergüenza.

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2 comentarios en “¿Cómo Buscar Empleo sin Enviar Curriculum?”

  1. Pingback: Cómo Buscar Trabajo | Deusto Alumni

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