Lecturas Domingo de Resurrección
Dios habla de manera sorprendente. Dios resucitó a Jesús entre los muertos, y de repente tanto silencio silencio se convierte en algo totalmente nuevo que podemos verlo con los tres personajes del Evangelio de hoy:
- María Magdalena: La que acompañó en todo momento a Jesús, pero quien busca a Jesús en el sepulcro. Era lo lógico. ¿Cuántas veces buscamos a Dios en sepulcros de toda clase, en historias pasadas, en recuerdos,… Dios nos espera en la vida, ahí se nos aparecerá.
- El discípulo amado: El que corre, el que primerea (verbo que usa el Papa Francisco). Necesitamos gente que vaya delante, que se corra, que sea ágil para ir a buscar el Señor, pero que luego espera a la comunidad. Fue el que vio y creyó.
- Simón Pedro: Es el que llega algo más tarde, pero su presencia, como el de la comunidad es el que permite entender la historia como algo nuevo, como la gran palabra de Dios sobre Jesús, que es que este lo resucitara. Necesitamos de los demás para entender.
Hoy es Domingo de Resurrección, es el momento de alegría y como dirá Ignacio, es el tiempo para ejercer el oficio de consolar. Hoy nuestro mundo necesita de consuelo, necesita de abrazos, necesita de alegría, necesita de esperanza. Hoy se necesita de apóstoles que hayan visto y que hayan creído, para que con su vida iluminen las zonas que necesiten de luz. Felices Pascuas a todas y todos.