Lecturas 14 de septiembre. Lunes XXIV tiempo ordinario. Exaltación de la Santa Cruz
El amor es el motor de nuestras vidas, ya sea por su presencia o por su ausencia. Nos levantamos por nuestros hijos, por nuestra pareja, por nuestra misión, por quienes amamos. El asunto está en cómo amamos.
Hoy Jesús explica cómo ama Dios. Hasta el final, sin medida y como dirá Pablo Dios ama hasta la locura y la necedad de la cruz. Es en la cruz donde crucifican a Dios mismo donde podemos encontrar el sentido del amor de Dios.
Lo de amar en general todos lo entendemos, pero lo de amar como Dios es un aprendizaje largo y costoso porque no es lo que en general vemos. Este modo de amor es contracultural ya que supone poner al otro antes a que a mí mismo, y eso nos cuesta mucho. Vivir el Evangelio es re-aprender a amar y eso, me temo, no lo enseñamos en nuestros colegios y universidades.