Lecturas 27 de septiembre. Domingo XXVI tiempo ordinario
A veces estamos tan cómodos en nuestro modo de vida que no necesitamos de DIos, nos valemos por nosotros mismos sin ninguna intervención divina. Nuestra vocación consiste en permanecer en este estado de semi-auto-satisfacción.
Jesús contrasta al stablishment (los establecidos) de su tiempo. Les dice que las prostitutas y los publicanos pes precederán, porque cumplen más la voluntad del Padre. Los marginados y excluidos son los que necesitan de Dios y los que necesitan reorientar sus vidas.
Es un día para contrastar nuestros apegos que nos impiden dejarnos convertir por Dios. Es un día para preguntarme por qué me cuesta, o por qué no puedo cumplir la voluntad de Dios. ¿Tanto miedo tengo a hacer el camino del Reino?