Lecturas 18 de enero Lunes II Semana Tiempo Ordinario
Si nos comparamos con tiempos anteriores estamos en la época de mayor velocidad de cambios que ha vivido la humanidad. Esa velocidad hace que vivamos desajustes intergenaracionales y sociales, y como desajuste hablo también de desigualdad.
Jesús se presenta como algo nuevo en su contexto. Su propuesta supera el marco religioso y nomativo, y lo representa en el novio. Su propuesta es la de un banquete, la de una boda donde se quiere celebrar el amor que Dios tiene por la humanidad.
Nos cuesta cambiar, nos cuesta que nos cambien; pero la cosa es que todo cambia. Pero no hay que cambiar por cambiar, sino que el cambio ha de apuntar al Reino. Debemos de aprender de la vida, debemos de dejar el tiempo que vino necesite para ser vino, debemos de dejar que los procesos terminen para ser lo que tienen que ser y eso sólo se logra con paciencia. Paciencia que es capaz de hacer los odres nuevos que necesita el vino nuevo.