Lecturas 29 de diciembre . Miércoles.
¡Cuánto nos cuesta tener experiencia de Dios! En un contexto que no quiere oír hablar de Dios, en un ritmo imparable, en una economía que nos convierte en sujetos de autorrendimiento, parece que no hya tiempo para Dios y creo que ni para nosotros mismos.
En medio de todo el gentío del templo, sólo Simeón es capaz de ver y entender quién es Jesús. Y desde la experiencia vital es capaz de formular ese reconocimiento, por el cual también ayuda a otros a descubrir el paso de Dios por la vida.
Hoy podemos agradecer y reconocer a los distintos Simeones que nos han ayudado a lo largo de la vida. Esas personas que nos han ayudado a vivir y experimentar eso de Dios con nosotros. Desde estas personas nos hemos acercado y aprendido a ver que de alguna manera Dios es parte de nuestra vida. Feliz miércoles.