9 de julio. Sábado XIV tiempo ordinario
El miedo al que pasará nos suele atenazar mucho en la vida y nos inmoviliza más de lo necesario. Especialmente hoy, entre algunos jóvenes, llama la atención el miedo que tienen a declararse como cristianos.
Jesús invita a los discípulos a no tener miedo. A expresar la experiencia de Jesús en donde haga falta. El Evangelio no es para que se quede en casa, sino que sus consecuencias están para que se vivan en la calle especialmente en relación a las personas más vulnerables.
En el día de hoy podemos agradecer a todas esas personas que nos han transmitido la buena noticia superando dificultades. Es la gente que nos ha enseñado a amar, a entregarnos al modo de Jesús. Mila esker. Feliz sábado.