18 de junio. artes de la XI semana del tiempo ordinario
La sociedad virtual y de la imagen nos hacen vivir una vida con filtros y con historias que nos quieren acercar a la perfección, sabiendo que como virtual no es del todo real. Entre tanto aspiramos a perfecciones que siempre serán imperfectas.
Jesús nos presenta a Dios como perfecto, una perfección que se explica en el modo de amar. Frente a la dificultad infinita que encontramos en ser como Dios se nos muestra el camino del amor que Dios ha tenido primero por nosotros.
Intentemos ser perfectos, pero en el amor no en la imagen. Se trata de ir algo más adentro para trabajarnos desde ahí en reconcoer a aquel que nos ha amado primero por medio de la gente que nos cuida y nos rodea. Feliz martes.