turas 19 de mayo, Martes 6º Semana de Pascua
En la vida hay momentos en que conviene marcharse, como el momento de dejar la casa materna e ir a descubrir y realizar un proyecto nuevo de vida. Ahora en esta situación nueva, hemos tenido que dejar marchar usos y costumbres que no sabemos si volverán de nuevo y que nos producen tristeza.
En estos discursos del Evangelio de Juan Jesús anuncia una y otra vez que se va al Padre y que conviene que sea así. Los discípulos, lógicamente, no quieren que esto sea así, y Jesús trata de prepararlos para cuando se «marche».
Una de las imágenes con que se explica la Iglesia es la de peregrina. En la vida estamos siempre en esa tensión entre permanecer y estar de paso. Aprendemos a que la gente va y viene de nuestras vidas por distintos motivos, y nos cuesta decir adiós aunque no terminamos de agradecer el hola con el que se empezó. La vida es la gran escuela donde aprendemos a vivir en libertad, a que la gente que queremos venga y se vaya, aunque eso nos duela. A veces resulta conveniente.