24 de enero, Martes de la III semana del tiempo ordinario
«La familia» es eso tan importante que hasta para los mafiosos es algo sagrado. Resulta que es la primera red de solidaridad que tenemos y es a partir de ella desde nos construímos como perosnas. El ausnto es que la familia también tiene su complicación y las mismas relaciones familiares evolucionan.
La familia de Jesús sirve de contraste con la nueva familia que anuncia. Se trata de la familia que escucha y vive la voluntad del Padre y genera nuevos vínculos de pertenencia y solidaridad. Se trata de ver que el Evangelio es nuevo para todo en la vida, incluso para la familia.
Estos días escribo desde Tánger, y hemos visitado un centro de acogida de niñas que viven mejor alejadas de la familia. Me sirve de ocasión para agradecer la mía y valorar la suerte que he tenido. Feliz martes.