UD Magis

3 de octubre. Jueves de la XXVI semana del tiempo ordinario

Mirar al mundo significa reconocer la cantidad de conflictos y víctimas que surgen por la violencia y por la injusticia. Hay como un clamor en el mundo por la paz, pero a la vez hace todo lo posible para que no haya paz.

Jesús envía sus discípulos en misión, a transformar este mundo en algo que se parezca más al sueño de dios. Uno de sus efectos es el de la paz tanto en nuestra vida personal como en la vida compartida .

Hoy estamos llamados a ser constructores de paz, a no legitimar narrativas de violencia, a construir relaciones justas y desde luego a construir puentes de paz. Eso empieza por nuestra propia vida y nuestra relación cercanas. feliz jueves

2 de octubre. Miércoles de la XXVI semana del tiempo ordinario Santos Ángeles Custodios

Antes se distinguía la mesa de mayores de la de los niños. En ese sentido los niños están apartados de los espacios de diálogo y de decisión, y por tanto en su minoría de edad también hay una minoría de actuar.

Jesús nos invita a hacernos como niñis. Se trata de ese proceso de desaprender aquello que nos quita la frescura y la ingeniuidad de la vida. Desde al sencillez, desde la verdad es como se ven nuevas todas las cosas.

Hoy podríamos ahcer ejercicios de desaprender. Dar un paso atrás y aprender de los niños el juego, la mirada curiosa al mundo y deseode hacer amigos. Se trata un ejercicio de madurez espiritual que nos hace niños. Feliz miércoles.

1 de octubre. Martes de la XXVI semana del tiempo ordinario Santa Teresa del Niño Jesús, virgen y doctora de la Iglesia 

¿Hacia dónde van nuestros caminos? Si entendemos la vida como un viaje será interesante saber haica dónde vamos. En la feista de la superficialidad nos cuesta encontrar el norte que marque nuestro rumbo y solemos andar perdidos en las ansias de cada día.

El viaje de Jesús a Jerusalén es un tema central en los Evangelios. Es el camino a su destino que está lleno de obstáculos y tensiones. La negativa de los samaritanos a recibir a Jesús anticipa el rechazo que sufrirá en Jerusalén.

Si queremos encaminarnos a nuestor destino será importante caer en la cuenta de que estamos en camino, en proceso y no estancados. En general nos gusta sentirnos establecidos, pero la vida nos lleva y por ello conviene hacernos algo más peregrinos. Feliz martes.

30 de septiembre. Lunes de la XXVI semana del tiempo ordinario

En una sociedad cada cada vez más desigual sería bueno saber quiénes son los más pequeños y vulnerables. La sociedad hace que nuestras miradas se centren en los aparentes casos de éxtio aupados por las redes, pero nos cierran los ojos a la vulnerabilidad.

La discusión entre los discípulos sobre quién sería el más importante revela una dinámica de poder que sigue estando presente en nuestras comunidades. La ambición y el deseo de reconocimiento pueden nublar nuestra visión y llevarnos a competir en lugar de colaborar.

Descubrir a los más pequeños a nuestro alrededor nos puede ayudar a cambiar la dinámica. En vez de convertirnos en escaladores sociales nos convertimos en personas que cuidan de otras de otras personas, en personas que cuidan de la gran comunidad. Feliz lunes.

29 de septiembre. Domingo de la XXVI semana del tiempo ordinario

En un mundo cada vez más híbrido es importante saber cuáles son las raíces que sostienen nuestra identidad. Se trata del ejercicio de reconocer qué es lo importante y qué es lo accesorio para reconocer en otros y en nosotros lo fundamental.

Hoy encontramos una llamada a la inclusión y a la radicalidad. Inclusión hacia aquellos que, aunque diferentes, actúan en nombre de Cristo. Y radicalidad en la lucha contra aquello que nos aparta de la vida plena en Dios.

Hoy podríamos agradecer neustras raíces que nos unen a otros pero que nos hacen distintos. Esas raíces que nos ayudan a ser radicales en las opciones fundamentales que acompañan nuestras decisiones clave. Feliz domingo.

28 de septiembre. Sábado de la XXV semana del tiempo ordinario

En general nos gustan las cosas claras, sólo que la complejidad de la vida nos las oscurece. Vivir en neustor mundo de incertidumbres es aprender a caminar entre oscuridades y alguna luz que nos pueda dar pistas.

Hoy el Evangelio nos anima a no quedarnos en la superficie de la admiración por lo que parece fácil o grandioso, sino a entrar en el misterio de la entrega y del amor. Jesús hoy nos invita, como lo hizo con sus discípulos, a caminar con él hacia Jerusalén donde será entregado.

En meido de nuestros ajetreos en nuestras pequeás cuevas necesiamos de alguna luz que nos sitúe. Se trata de reconocer qué es lo que iluminan los pasos de nuestra vida y caer en la cuenta hacia dónde nos llevan. Feliz sábado.

27de septiembre. Viernes de la XXV semana del tiempo ordinario

En la soceidad superficial y acelerada los espacios apra profundizar se reducen. Necesitamos de momentos de calidad para ir a dentro, para estar atentos y conectarnos a la realidad d enuestra vida en la que Dios está presente.

El pasaje comienza con Jesús orando a solas. La oración es el lugar donde encontramos la intimidad con Dios y donde podemos discernir su voluntad. Al igual que los discípulos, somos invitados a buscar a Jesús en la oración para descubrir quién es Él y quiénes somos nosotros.

Parar un rato, orar, respirar, mirar al horizonte son cosas que nos ayudan a situarnos en nuestro día a día. El objetivo es vivir y no sobrevivir y por tanto es fundamental tener momentos señalados en los que podamos respirar y reconocer nuestra propia dientidad. Feliz viernes.

26 de septiembre. Jueves de la XXV semana del tiempo ordinario

A lo largo de la vida vemos infinidad de cosas que otros nos muestran y que no responden a algo que personalmente desearamos ver. En algún modo, la ingente intrusión de imágenes en nuestra imaginación a aletargado nuestro propio deseo y nuestra curiosidad.

Herodes tiene curiosidad, tal vez no sea evangélica, pero el evangelista muestra otras miradas hacia la dientidad de Jesús. De hecho, el nudo del Evangelio es mostrarnos a Jesús con su vida y con sus palabras.

Hoy podríamos examinar nuestros deseos y curiosidad por la realidad. ¿De qué tengo ganas de ver que surgen de mi propia curiosidad? Se trata de un ejercicio de libertad en el que podamos ver e imaginar una realidad distinta a la que se nos muestra por la sociedad. Feliz jueves.

25 de septiembre. Miércoles de la XXV semana del tiempo ordinario

Atender a los noticieros es atender al cúmulo de noticias nefastas que nos harán pensar que estamso al borde de la autoextinción. Así necesitamos aislarnos de este mal rollo general y tenemos hambre de buenas noticias.

Anunciar la Buena Noticia ignifica ser testigos del Reino con nuestra vida. Así como los discípulos fueron enviados a curar enfermos y liberar a los oprimidos, nosotros también estamos llamados a llevar sanación y libertad a los demás.

¿Cómo podría ser hoy portador de buena noticia? Se trata de aprender a mirar el lado bueno de la vida, a mirar con otra profundidad la realidad de tal manera que lo negativo no oscurezca ni nuestra mirada ni nuestro corazón. Feliz miércoles.

24 de septiembre. Martes de la XXV semana del tiempo ordinario

Hasta en las películas del Padrino nos recuerdan la importancia de la familia. La familia es la primera red de solidaridad y de amor que conocemos. Hoy el gran proceso de individualización que vivimos hace que se fragilicen esas redes y hasta las mismas familias se hacen más frágiles como espacios de solidaridad y ayuda.

Jesús expande la definición de quiénes son sus verdaderos parientes. Para Jesús, el concepto de familia se agranda y lo hace extensivo a la expereincia del Reino de Dios, donde los lazos de unión van más allá.

La invitación de hoy es agradecer la familia como espacio en el que aprendemos a amar y a comprometernos con los demás. Es ese espacio en el que nos han cuidado y se nos invita a que esto también vaya más allá de nosotros. Feliz martes.