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14 de abril Viernes de la Octava de Pascua

Cuando nuestra convivencia es cada vez más solitaria, cuando se privatiza lo religioso, cuando los vínculos comunitarios se fragilizan es cuando m´sa necesario se hace eso de ir contigo. Sólos no podemos, sino que necesitamos de los demás para vivir bien.

Pedro, es que será referente comunitario, vuelve a la vida normal con sus compañeros. Estando con ellos aparece Jesús que de nuevo les trastocará los planes y les invitará a una nueva aventura de vida. El plan es personal y comunitario.

Hoy podríamos dar gracias por todas aquellas personas que nos dicen «vamos contigo». Esas personas que se implican, se co(i)mplican con nosotros y con quienes formamos algún tipo de comunidad. Feliz viernes.

13 de abril Jueves de la Octava de Pascua

Esto del mundo virtual es parte de nuestro mundo. En él nos reprentamos en las redes de modo virtual, teletrabajamos, buscamos pareja y todo ello puede hacer que a veces nos olvidemos de la persona misma y nos quedemos en la representación virtual de la misma.

Lo virtual ha sido un modo de aproximarnos al Resucitado. Se le ha pensado como fantasma, como memoria,… pero el hecho es que el Evangelio en esta aparición de Jesus, es Él mismo quien nos dice «soy yo en persona».

El reto es que lo virtual esté lo más próximo de la persona. Que ese salto entre la realidad representada y lo representado sea más bien ajustado, especialmente cuando hablamos de nuestras relaciones. El reto es que nos veamos todos como nosotros en persona. Feliz jueves.

12de abril Miércoles de la Octava de Pascua

Ya la santa decía eso de «vivo sin vivir en mí», y es que demasiadas veces estamos en modo automático y robotizado. En esta sociedad «algoritmizada» se nos está olvidando que tenemos un corazón de carne y es por ello que a veces las vidas se vuelven más grises de lo que quisiéramos.

Los discípulos de Emaús están al principio, no entiempos grises, sino en tiempos negros. Su proyecto con Jesús ha fracasado y no saben hacer otra cosas que volver a lo de «antes». Jesús aparece y enciende sus corazones de tal manera que su vida y su proyecto se convertirán en algo totalmente nuevo.

Una idea para hoy podría ser mirar la temperatura de nuestro corazón. Se trata de recordar que es de carne y a modo de marcapasos animar al corazón a que lata por la gente que queremos y por la vida que vivimos. Feliz miércoles.

11 de abril Martes de la Octava de Pascua

Cuando entramos en modo negativo la tendencia es a encerrrarnos en nosotros mismos. Disminuimos contactos con los demás y todo se nos hace más c uesta arriba. Parece que nososotros solos tenemos que cargar con la vida.

En el Evangelio vemos la progresión de María, al principio está sola y llorando. La siguiente escena es el encuentro con Jesús resucitado que la envía a sus hermanos. Jesús le saca del ensimismamiento llorón a la misión, a convertirse en agente activo del Reino.

Hoy podríamos ir a nuestros hermanos. Se trata de salir de nuestro cómodo rincón y salir al encuentro de la gente que tengamos más o menos cerca. Se trata de encontrarnos y dejar que obre la magia de la humanidad: juntos la vida se lleva mucho mejor. Feliz martes.

10 de abril Lunes de la Octava de Pascua

Hay veces que esto de la alegrarse cuesta. El mirar el mundo, cómo van las cosas, los líos que tenemos y encima nos tenemos que alegrar. La que para algunos es irreverente película titulada la vida de Bryan me parece que es estimulante en eso. En la escena final un crucificado empieza cantar para decirnos que miremos el lado luminoso de la vida. Alegrarse no es un acto de voluntad, sino un modo de situarse en el mundo.

Las y los discípulos están desolados y les aparece un tipo que les dice alegraos. Les falta reposnder pero ¿qué broma es esta? Pero no, reconocen al Resucitado y acogen la misión que les encomienda.

Hoy puede ser un día para la alegría. Un día en el que sonriamos, un día en el que tarareemos canciones que nos alegran, un día de comaprtir con otros que esto de Jesús es fuente de vida y alegría. Feliz lunes.

9 de abril Domingo de Resurrección

Lo que hay que decir hoy seguro que las has oído o leído otras veces, pero me gustaría que no te lo tomaras como siempre. Olvídate por un momento de la rutina; de esas reflexiones a veces tan monótonas que apenas nos rozan la piel. Olvídate por un momento del día a día: de las discusiones domésticas, huesos doloridos, dolores de cabeza, de mis miedos habituales y de mis cansancios.

Hoy las palabras evangélicas pueden ser nuevas. Si creéis en las palabras del Evangelio, vuestra vida será nueva, empezaréis a vivir de otra manera, la rutina diaria tendrá una profundidad desconocida, las celebraciones religiosas tendrán una luz nueva, la alegría que nadie puede arrebatar será invitada, la muerte misma será una puerta llena de oportunidades, la vida será un recorrido acompañado por la esperanza, la misma enfermedad tendrá un rostro desconocido. Para que comprendáis bien el Evangelio, es necesario que el Señor esté con vosotros, que os levante el corazón, que os dé las gracias a Dios.

Hermanos, esto es lo que tengo que deciros hoy: ¡¡¡Jesús de Nazaret, hijo de José y de María, injustamente muerto y enterrado, ha resucitado y vive para siempre!!! La muerte ha sido vencida: el muro infranqueable, la oscuridad existencial, el mal constante que nos rodea, la queja constante no son del todo verdad. Que no pase este tiempo de Pascua sin conectar con la vida de Cristo. Feliz Domingo.

8 de abril Sábado Santo

Hoy la Iglesia no celebra nada hasta la vigilia pascual. Tras la muerte en cruz todo se ha quedado en un clamoroso silencio. Un silencio que clama por la injusticia cometida, un silencio que guarda todo en el corazón, un silencio que se convierte en lo previo a lo que será la palabra de Dios.

Nuestro mundo neccesita de silencios que hablen. Silencios que den oportunidad a que la palabra se haga vida, a que la palabra tenga significado en medio del bullicio y palabrería en la que vivimos. Dejemos que este día de silencio hable por sí mismo.

7 de abril Viernes Santo

Para interpretar el misterio de la cruz, los evangelistas nos recuerdan que la muerte de Jesús vino acompañada de tinieblas. Estos tienen un sentido simbólico a partir de unos textos proféticos. La oscuridad aparece en la descripción del Día de Yahve. El día de Yahve es el día de la salvación definitiva. Así que, cuando los relatores nos recuerdan que hay oscuridad en el calvario, nos muestran que la salvación en la muerte de Jesús Dios se está materializando definitivamente. La Resurrección, la donación y presencia del Espíritu le castigarán definitivamente. La cruz no es la derrota, es la victoria.

Si Cristo es la máxima expresión del amor del Padre en la Cruz, es necesario anunciar a los hermanos que en la Cruz se produce un verdadero encuentro con Dios. . El creyente es testigo vivo del amor de Dios en medio del mundo con cruces. Sólo el creyente puede transmitir esta sabiduría y esta facultad del amor de Dios. Y el mundo lo necesita.

6 de abril Miércoles Santo

En estos días eso de dar ejemplo con la propia vida se hace cada más difícil de ver. Las personas a las uqe miramos no tienen conciencia de dar ejemplo, sino conciencia de ser influyentes y poderosas. Se nos olvida el poder del ejemplo.

Jesús enseña a su discíplos con el ejemplo y especialmente hoy con el gesto del lavatorio de los pies. Los discípulos no entienden, pero ven y luego entenderán que su amigo les está diciendo que les ama hasta el extremo.

Hoy, día del amor fraterno, es un día en el que podemos seguir el ejemplo delos que nos aman y amaron por un lado, y por el otro, dar ejemplo del amor que nosotros tenemos por otras personas. No hay que hacer nada especial, sólo amar. Feliz jueves santo.

5 de abril Miércoles Santo

Vivimos tiempos de mercantilización y en nuestra sociedad se ha vendido y se vende casi todo. La cosa es así que los sujetos mismos se ponen en venta monetizando aspectos de su vida publico/privada expuestas en redes sociales.

Que Jesús fuera entregado por 30 monedas no nos extraña. Ocurre igual que el hijo de Jacob, José que fue vendido por sus hermanos. El Hijo de Dios también tiene que llegar a ser vendido como mercancia para llegar a toda la humanidad que sufre.

El mejor medio para combatir la mercantilización es la gratuidad. La economía de Dios es la economía de la gracia, de lo gratuito, y puede ser una pista para nosotros. ¿Qué puedo hacer hoy gratuitamente por los demás? Feliz miércoles.