Lecturas 2 de mayo. Domingo V semana de Pascua
En esta vida acelerada que tenemos vamos tan rápidos que a veces ni sabemos lo que queremos. Vamos de un sitio a otro, pasamos de una etapa a otra haciendo lo que hay que hacer pero en el camino se nos olvida qué queremos hacer.
Jesús nos invita a permanecer con Él para que nuestra vida sea fructífera, no por nosotros sino por nuestra vinculación al Padre. Se trata de vivir y permanecer en estrecha relación con Dios que nos da la vida y que nos invita a la misma.
Hoy domingo puede ser un momento para repasar nuestros deseos profundos en la vida. Necesitamos parar y conectarnos para saber qué ha sido de nuestros deseos, cómo están y cómo siguen animando nuestra vida. Felicidades a todas las madres en este primer domingo de mayo. Feliz domingo.