Lecturas 15 de agosto. Domingo XX semana tiempo ordinario Asunción de la Virgen María
Hoy celebramos a María, la madre de Jesús, la que acompañó todo el camino de Jesús, la que se fío de Dios, la mujer del pueblo,…. Nuestras celebraciones muchas veces van asociadas a la alegría, alegría que tanto necesitamos en muchos ámbitos de la vida y alegría que viene de Dios.
El Magnificat es la oración de agradecimiento comprometida. Se compromete con el Dios que le da todo, se compromete con los pequeños del mundo y se compromete desde el agradecimiento. Vivirnos agradecidos nos pone en el camino del servicio en el modo en que María se va a ayudar a su prima.
Hoy es día de (no) fiestas en muchas localidades, hoy es día de celebración, hoy es día de alegría. Puede ser una ocasión para que cada uno hagamos nuestra oración personal del Magnificat, que demos gracias a Dios por lo que nos da, por la gente que nos pone y que pidamos por los pequeños del mundo. Feliz día de la Virgen.