Lecturas 8 de septiembre. Lunes XXIII tiempo ordinario -Natividad de María.
El relato del nacimiento de Jesús no puede ser de otra manera que vinculada al modo de hacer de Dios. Ese modo de hacer de Dios necesita de la colaboración humana y vemos que Jesús nace gracias a María y a su sí a colaborar con Dios.
El Espíritu Santo se hace presente en nuestra historia de cada de día. Es interesante comprobar como en las primeras comunidades tenían una conciencia muy viva de la presencia de Espíritu que intervenía en los aconteceres de la comunidad, en los viajes y en el devenir de la historia.
María nos enseña que desde lo más pequeño hasta lo más grande puede ser dar ocasión a que Dios actúe . Ella fue la primera creyente, la mujer del pueblo, la madre de Dios y muchos más modos de llamarla, pero sobre todo hoy agradecemos y recordamos que esta mujer confío en Dios y que gracias a ella aquí estamos nosotros como seguidores de Jesús.