Sábado, 4 de junio VII semana de Pascua
Nuestras sociedades suelen imponer algunas normatividades que a veces son dolorosas. Hay una canción que este mes de junio sonará mucho y dice A quién le importa lo que yo haga. Siempre hay gente dispuesta a juzgar y valorar lo que hace la otra persona, pero está menos atenta a la viga de su ojo.
en el Evangelio de hoy, Pedro pregunta por los demás, pero el asunto es él mismo. Jesús nos llama a cada uno por nuestro nombre, y nos quiere a cada uno de una manera particularizada. A mi de un modo y con una vocación y a ti de otro modo y con otra vocación.
Tenemos el reto de aprender a disfrutar de la diversidad que la misma naturaleza nos pone delante en su amplia biodiversidad. Hoy puede ser un día para celebrar la propia diversidad (todos somos muy nuestros), pero sobre todo a celebrar la diversidad de nuestra gente. Feliz sábado.
Estar atenta a la viga de mi ojo! Buen recordatorio, ayuda a admitir la diversidad en nuestro entorno y tb, en la Iglesia!!