Lecturas 9 de agosto. Domingo XIX tiempo ordinario.
En la vida aparecen tormentas y noches oscuras personales y colectivas de las que necesitamos salir. Son momentos en los que sentimos miedo, nos vemos muy frágiles y vulnerables, de igual modo en que los niños hay momentos que se ven sin su madre y empiezan a llorar desconsolados.
Jesús aparece ante los discípulos de una manera inesperada. Se trata una vez más de un relato sobre la fe para descubrir la identidad de Jesús. Es lo que nos pasa a los seguidores de Jesús, que Jesús y su Reino aparecen de modo inesperado y necesitamos discernir si es Jesús o no, y eso nos genera duda y miedo.
Cuando estamos en los túneles de la vida, vamos caminando hasta que encontramos la luz de la salida, en ese momento se nos ensancha el corazón. El momento de la mano que nos saca del apuro y del miedo, es también un momento de Dios. Ánimo.