Lecturas 17 de febrero. Miércoles de Ceniza
Comenzamos la Cuaresma, un tiempo donde queremos agudizar los sentidos y estar más atentos a nuestra vida con Dios y con los demás. Vivimos hiperestimulados por muchas cosas tales como trabajo, noticias, ruido, comida, consumo,…. Es tiempo de parar.
Jesús nos habla de la sinceridad de nuestras acciones. Nos invita a que hagamos las cosas, no por la gente, sino por un deseo sincero que nace de nuestro corazón. Se ve que el postureo es viejo en el ser humano.
La oración, la limosna y el ayuno son prácticas que nos ayudan a prepararnos. En griego se llama askesis y no es otra cosa que el prepararse y el disponerse. Nuestros cambios en la vida requieren disposición, es decir tener ganas y tener medios medios para cambiar, para convertirnos al evangelio. ¿Ya sabemos en qué queremos cambiar?