16 de agosto. Viernes de la XIX semana del tiempo ordinario
Hay una frase que sale en las películas que dice «no es nada personal, son negocios» y refleja a veces cómo nos tomamos la vida. Quitar el corazón a la vida es generar un proceos de despersonalización que se extiende a demasiados ámbitos de la sociedad.
Jesús nos anima a mirar al fondo de las cuestiones, y en este caso nos anima a reconocer el sentido del amor en la relación de pareja. Se trata de situarnos más allá de la normativa y vivir la experiencia del amor en nuestras relaciones.
Hoy podríamos mirar cómo vibra nuestra corazón. Se trata de dejar que el corazón resuene ante toda la realidad que me rodea y no sólo en algunos aspectos. Así, como dice el profeta podremos arrancar nuestro corazón de piedra y convertirlo en un corazón de carne. Feliz viernes.