Lecturas 10 de agosto. Martes XIX semana tiempo ordinario.
¿Quién tiene éxito en nuestra sociedad? ¿El que se ama a sí mismo, o el que entrega la vida por el Reino? Si miramos las redes parece que quien tiene éxito tiene tan alta estima de sí mismo que incluso hace una marca comercial de su persona para monetizarla, y seguir queriéndose aún más con los bolsillos más llenos.
El grano que muere es el que da fruto y Jesús lo explica como ley de vida. Quien quiera vivir el Reino ha de seguir a Jesús, estar con Él, apasionarse con Él, morir y resucitar con Él. Es la paradoja de Dios, que piensa distinto a nosotros.
Sin querer nos vemos envueltos en carreras de éxito. Se nos dice que si hacemos esto y lo otro seremos exitosos y por tanto felices. La verdad es que eso del éxito tiene mucho de artificio y poco de natural. Lo natural es amar, lo propio del ser humano es la solidaridad, y por tanto el éxito consiste en amar y por tanto en salir de uno mismo para encontrarse con los otros. Feliz martes.