14 de noviembre, Lunes de la semana XXXIII del tiempo ordinario. San José Pignatelli SJ
Imaginar que de repente no ves nada y te has convertido en una persona ciega tiene es una experiencia tremenda. Igualmente, si es al contrario, si llevas mucho tiempo ciego y de repente por un encuentro recobras la vista es una experiencia tremenda. La diferencia, es levantarte y por seguir tu vida, en este caso dando gloria a Dios.
Creer en un mundo de luz y colores, pero sobre todo creer en Jesús, según el evangelista, aquello que hace posbile que estas cossa sucedan. A veces nos quedamos en lo milagroso, pero para el evangelista el punto está en la fe. Feliz lunes.