22 de enero, Miércoles de la II semana del tiempo ordinario.San Vicente
Vivimos en un mundo donde muchas veces priorizamos las normas y protocolos por encima de las personas. Es común ver cómo las estructuras rígidas y las prioridades equivocadas nos llevan a ignorar las necesidades de los más vulnerables.
Jesús nos enseña que lo esencial es siempre la persona. En un contexto que no comprende ir más allá de la norma, Jesús desafía a los poderosos por medio de la misericordia y el amor curando al paralítico. Así lo que estaba paralizdo se pone de nuevo en la amrcha de la vida.
Hoy podríamos pensar qué es lo que está paralizado en nuestras vidas y en nuestro entorno. Se trata de identificar aquello que nos bloquea y no nos deja participar en la alegría de la vida. Feliz miércoles.