23 de diciembre Lunes Feria de Adviento
En un mundo donde las noticias tristes parecen ocupar el centro, vemos que en las periferias también hay situaicones que animan la esperanza. Nacimientos, superación de enfermedades, una boda, ,… Son momentos en los que la vida compartida da pie a la alegría compartida.
El nombre de Juan no era lo esperado, pero señalaba algo más grande: una misión dada por Dios. En nuestras vidas, también hay momentos donde lo inesperado revela caminos nuevos. Dios nos llama por nuestro nombre único, con un propósito que nos llena de vida y nos conecta con su Reino.
Hoy podríamos orar y pensar en con nuestro nombre. En el sueño de aquellos que nos lo pusieron y qué es lo que querían y quieren para nosotros. Es una ocasión para agradecer todos los nombres que nos han ayudado en la vida. Feliz lunes.