27 de mayo. Lunes de la VIII semana del tiempo ordinario
En la sociedad de la sobreabundncia de cosas a la gente le falta suele faltar algo. Hablamos de sentido, libertad, amor, espiritualidad,… que es todo eso que no se puede comparar y que hay que cultivar con sumo cuidado.
Jesús le dice al joven rico que lo tiene todo, que le falta una cosa, que es vender todo lo que tiene. Dicho en evangélico, al joven le falta la libertad sobre sus propias cosas y sobre sus seguridades. El Evangelio es un camino de libertad que va más allá de nosotros mismos y de nuestros miedos.
¿Cuál es la cosa que me falta hoy? En nuestra biografía vamos dando pasos y tal vez creamos que ya tengo todo, pero siempre tenemos sed y hambre de algo que es mucho más que nosotros mismos. Feliz lunes.