12 de octubre. Sábado de la XXVII semana del tiempo ordinario. Virgen del Pilar
Cada uno somos hijos e hijas de neustra madre. Es desde ellas como comienzan las historias de cada uno y es con ellas como crecemos para afrontar la vida. En nuestra sociedad hay palabras uqe homenajean a las madres, pero tal vez necesitemos dar una vuelta a cómo cuidamos a las madres.
La exclamación de la mujer también nos recuerda la especial devoción que los cristianos hemos tenido y tenemos por María, la madre de Dios. En ella, vemos el modelo de responder a la invitación de Dios a la vida. Su «sí» a Dios cambió el curso de la historia y nos habla de su confianza en la palabra de Dios.
Todos somos conscientes de lo que supone nuestra madre, pero a veces en mitad del ruido nos olvidamos de muchas mujeres que también son madres y están fuera del foco informativo. Hoy podríamos ahbalr del milagro de las madres que están en mitad de guerras no queridas, las madres que viven en medio de violencia y en definitiva, acordarnos de todas las madres que hacen que el milagro de la vida y el amor sean posibles.. Feliz sábado día del Pilar.