13 de mayo, Viernes IV semana de Pascua
Como seres humanos vivimos en un mundo cada vez más complejo. La sociedad en la que vivimos se ha complejificado de tal manera que el conocimiento para desenvolverse en la misma requiere de mucho conocimiento.
Los discípulos no terminan de entender a Jesús y Tomás hace de portavoz del grupo. Lo que plantea Jesús es confuso y suficientemente abstracto como para generar confusión en el seguidor. Decir que yo soy el camino la verdad y la vida necesita de una concreción que a primera vista no se ve.
Hoy tenemos el reto de saber cuál es nuestro camino como personas y como humanidad. No es fácil, pero ciertamente hay intuiciones como las que Jesús no da. El reto de hoy sería tratar de indagar ¿cómo podemos saber eso?, o dicho de otra manera ¿qué puedo hacer para empezar a saber cuál es el camino? Feliz viernes.