16 de septiembre. Viernes de la XXIV semana del tiempo ordinario
La ciudad se ha convertido en el icono de nuestra civilización. Es en ella donde se dan los grandes acontecimientos, las grandes decisiones y donde más gente de la humanidad vive. También es el lugar de Dios. Lo curiosos es que es una creación totalmente humana con algunas dinámicas inhumanas.
Lo de Jesús es para la gente y se hace con gente. En ese grupo destacaban las mujeres en una sociedad bastante más machista que la nuestra y esa presencia de mujeres llama la atención en su entorno.
Hoy podríamos descubrir a Jesús en la ciudad, en esos lugares que humanizan la vida de los conciudadanos. Se trataría de revertir esas dinámicas en dinámcias de humanidad, es decir de solidaridad, de paz y de convivencia para todos. Feliz viernes.