Lecturas 15 de diciembre. Martes III Semana de Adviento
¿Cuándo cumplimos la voluntad de Dios en un tiempo en el que su voluntad no importa, sino la nuestra? Hoy en día se hace raro encontrarnos con personas que se plantean su vida como cumplimiento de la voluntad de Dios. Estamos en una sociedad en la que Mi opinión es la importante, Mi modo de ser, Mi sueño, y todo está tan lleno de yo, que no hay sitio ni para Dios ni para nadie.
Jesús nos pregunta por quién cumple la voluntad de Dios entre los hermanos, pero al final nos presenta a los publicanos y las prostitutas, personas proscritas en la sociedad de su tiempo. Aquellas personas que ya no tienen nada que perder y que sólo tienen la esperanza puesta en Dios. ¿Igual, yo también puede empezar a esperar realmente en Dios?