Lecturas 3 de julio. Viernes . Santo Tomás apóstol
Hoy celebramos a Santo Tomás Apóstol, un santo con el que nos pudiéramos identificar muchos de nosotros que vivimos un sano o insano escepticismo general. Solemos dudar de todo aquello de lo que no tenemos a la vista y podamos comprobarlo personalmente, cosa que ya con la introducción del método científico se generalizo y se convirtió en ciencia.
Hoy Jesús nos invita a preguntarnos por qué creemos: por inercia, por fidelidad a un proyecto, por una relación personal, por que es lo que hay que hacer… Creer tiene una dimensión personal ineludible, y es por eso que tiene un componente de decisión personal y libre.
Creer por creer, sirve mientras funciona como muchas otras cosas en la vida. El reto es que hoy en día no hay un clima que invite a creer, sino todo lo contrario y tanto la cultura como el espacio social se ha convertido en un espacio que genera otra inercia a la increencia. En los dos lados, en el de la credulidad y la incredulidad hay un espacio enorme en el que cada persona se siente interpelada a situarse. ¿Por qué (no) crees?