Lecturas 9 de noviembre. Lunes XXXII Tiempo ordinario. Dedicación de la Basílica de Letrán.
Hoy modernamente se utiliza el termino monetizar. Se trata de que aquello que haces sea susceptible de generar ingresos. Hoy, sobre todo en las redes, se monetiza todo, la capacidad de jugar a videojuegos, mi vida privada, mi cuerpo, mi gato,…. Pero esto no es algo nuevo, sino que la misma Iglesia en su historia y también en su presente ha sabido también ser maestra en eso.
Jesús ataca el Templo como aparente lugar de Dios pero profanado por otros intereses. El templo se convirtió en centro de poder político y religioso, en centro económico donde parecía que cuando más invocaban a Dios, más se alejaban de Él.
Ante la creencia general de que todo se puede comprar y vender, el Evangelio se resiste. Sin eludir las contradicciones de cada día, no nos podemos (no deberíamos) poner en el mercado a nosotros mismos y a nuestros hermanos como seres humanos. Cada uno somos templos de Dios, no hagamos un mercado de nosotros mismos.