25 de junio, Miércoles de la XII semana del tiempo ordinario
En tiempos de sobreinformación, donde el ruido dice decir verdad en redes, medios y entornos cercanos, se hace difícil discernir qué es verdad. Las apariencias pueden seducir, pero no garantizan autenticidad. Y lo falso, aunque bien presentado, acaba mostrando su vaciedad.
Jesús nos invita a mirar más allá de las palabras o gestos externos: es el fruto el que revela la verdad. No basta con parecer, es necesario ser; no basta con prometer, es urgente cumplir. La coherencia entre lo que se dice y lo que se hace es también la medida del Reino.
Intentemos tener una mirada honda y paciente, que no se deje confundir por envoltorios. Aprendamos a valorar desde la raíz y desde el tiempo, lo profundo de la realidad; para que así carguemos con ella y la podamos transformar. Feliz miércoles.
